La menor tenía 13 años y falleció ahogada durante ritual. La Policía nipona detuvo al padre de la víctima y a un sacerdote en Kumamoto
Foto: Archivo, Reuters.
La Policía detuvo hoy en Kumamoto (sur de Japón) a un sacerdote y al padre de una niña de 13 años que murió ahogada mientras le practicaban un ritual para quitarle los “espíritus malignos”, informaron medios locales.
Durante el exorcismo, que se realizó hace un mes pero que se conoció este martes, la pequeña Tomomi Maishigi fue atada a una silla con la cabeza hacia arriba para aplicarle un ritual budista dirigido a espantar a los malos espíritus, el cual consiste en arrojar agua sobre la cabeza, detalló el diario Yomiuri en su edición digital.
Atsushi Maishigi, padre de la niña, y el sacerdote Kazuaki Kinoshita rechazaron las acusaciones de la Policía por la muerte de la menor. Aseguran que sus acciones estaban “encaminadas a exorcizar los malos espíritus” y no a infligirle un abuso físico a la pequeña.
Los padres de Tomomi acudieron al sacerdote preocupados por una enfermedad física y mental que padecía su hija, y este recomendó iniciar el ritual con el que la pequeña supuestamente se recuperaría una vez hubiera expulsado sus “demonios”.
Fuente: peru21.pe
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